Fases del calendario lunar y sus características
En las diferentes culturas existen numerosas leyendas, mitos e historias asociadas a las fases de la Luna. Esto no es de extrañar puesto que desde los comienzos de la vida del hombre, ha basado sus ciclos vitales y se ha orientado en el tiempo basándose en los ciclos de la luna, creando así un calendario lunar. Si bien hoy en día utilizamos un calendario basado en los ciclos solares, muchas de estas culturas dirigían su mirada a los ciclos lunares y basaban sus predicciones, sus rituales, sus días festivos y realizaban sus actividades en base a las lunaciones, que no es otra cosa que el periodo de tiempo en que la luna retorna a la misma fase de donde partió y dura algo más de 29 días.
Las fases lunares y sus rasgos distintivos
La Luna, entre otras, cosas ejerce una poderosa atracción gravitacional sobre el planeta Tierra y debido a ello siempre se ha tenido en cuenta sus fases para determinar ciertas pautas en el comportamiento de la naturaleza y el hombre. Como prueba de ello podemos recordar aquello de que en Luna Nueva se incrementan los casos delictivos asociados a estados de furia e instintos desatados. Otro ejemplo es la sincronización de los ciclos menstruales con las fases lunares.
En realidad, la Luna lleva la cuenta de muchos ostros ciclos: las mareas, la germinación… Hay quienes se basan en las fases lunares para predecir el sexo de sus bebés. Las fases de la luna surgen del movimiento orbital de la Luna en torno a la Tierra, donde, en cada una de sus etapas, refleja en mayor o menor medida los rayos del sol, además de evolucionar hacia una etapa diferente. Las fases de la Luna son básicamente 4, pero, fácilmente puede considerarse que son 8, todo dependerá del grado de detalle con que se muestren.
Luna nueva o novilunio: Aunque podemos partir de otra fase lunar, tomaremos ésta como referencia y punto de inicio de las fases lunares. En esta fase, la Luna es completamente invisible a los ojos puesto que se encuentra entre la Tierra y el Sol y por ende no refleja los rayos solares a la Tierra.
Luna creciente: es una fase cuya duración abarca el periodo de tiempo que va desde el momento en que la Luna es visible por primera vez hasta que comienza la fase de Cuarto creciente. Se nos muestra una luna que aumenta hasta menos de la mitad de su tamaño.
Cuarto creciente: la Luna se halla en el vértice que forma 90 grados entre la tierra y el sol y por ende se ve la mitad de su tamaño.
Gibosa creciente: la Luna muestra un gran tamaño, dando la apariencia de poseer una enorme giba, culminará cuando la Luna se muestre en toda su magnificencia.
Luna llena o plenilunio: en esta fase, la Luna, por estar en línea con el Sol y la Tierra, refleja los rayos solares en toda su cara visible.
Gibosa menguante: luego de alcanzar su máximo tamaño es momento de menguar. La Luna emprende el viaje de regreso, mostrándose cada vez menor, hasta llegar a la mitad de su tamaño.
Cuarto menguante: su aspecto es similar a la que tiene en cuarto creciente, con la salvedad de que ahora está disminuyendo de tamaño.